jueves, septiembre 07, 2006

COMO EN EL FRAUDE DEL 88 SERÁN DESTRUIDAS LAS BOLETAS ELECTORALES DEL 2006.

Esta es la mayor prueba de que SÍ hubo fraude electoral: el IFE no sólo se niega a que los ciudadanos tengan acceso a las boletas electorales, sino que además anuncia que serán destruidas. Los detalles en esta nota de PROCESO:
Rechaza el IFE acceso a boletas electoralesdaniel lizárraga
07/09/2006
• Notifica a Proceso que serán destruidas una vez concluido el trabajo del TEPJF
México, D.F., 6 de septiembre (apro).- El Instituto Federal Electoral (IFE) rechazó que los ciudadanos puedan acceder a las boletas utilizadas en la elección para Presidente de la República, y anunció que éstas serán destruidas una vez concluido el trabajo del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
En una notificación enviada a Proceso, la Secretaría Ejecutiva y el Comité de Información del IFE concluyeron que no hay posibilidad alguna de permitir el paso a los sitios en los cuales se resguardan los paquetes electorales, ni tampoco abrir los sobres con los votos.
Con base en la Ley Federal de Transparencia, el pasado 28 de julio, Proceso presentó un paquete de tres solicitudes de información. En dos de ellas, se demandaron copias de documentos oficiales elaborados por el IFE durante el pasado 2 de julio, y en otra se pidió acceso a las boletas para Presidente de la República, a fin de realizar un nuevo conteo independiente de los partidos, candidatos y organizaciones a fines.
El IFE aceptó entregar las actas de escrutinio y cómputo de las casillas, pero rechazó que cualquier ciudadano y los medios de comunicación puedan manejar las boletas.
La negativa del IFE gira, fundamentalmente, sobre dos ejes: los votos no son documentos públicos, y el Consejo General tiene la obligación de procesarlos, cuidarlos y después destruirlos.
Las boletas no se ajustan a la definición legal de documento de acuerdo con la Ley Federal de Transparencia y el Reglamento del IFE en materia de transparencia. Para que pueda convertirse en tal, necesariamente debería registrar actividades o facultades de los servidores públicos, argumentaron.
“Las boletas no son documentos jurídicamente hablando, sólo son la expresión material de la preferencia electoral de la ciudadanía votante. Las boletas registran la expresión popular del voto y esa expresión no puede calificarse como actividad o facultad del IFE y sus servidores públicos”, justificaron.
De esta manera, el IFE rompió el vínculo entre boletas y documentos públicos que lo hubiera obligado a permitir el acceso o, en su defecto, a clasificarlas como reservadas.
Por otra parte, señalan que el Cofipe regula la “inviolabilidad de los votos” y establece los casos excepcionales, extraordinarios y de última instancia para la apertura de los sobres, exclusivamente, en las sesiones de cómputo distrital.
En la negativa de acceso, el IFE agregó que no existe disposición alguna en el Cofipe que regule el acceso a las boletas fuera de los caso previstos.
“Sobre el destino de las boletas, el artículo 254 del Cofipe mandata su destrucción. Dicha destrucción es el acto que, por naturaleza, explica y demuestra la definitividad de las distintas etapas del proceso electoral. Una vez que el TEPJF resuelve los diversos recursos que recaen en el proceso electoral –dentro de los que se contempla el conteo de los votos que presentan dudas-- el proceso es definitivo. El TEPJF ya determinó que los materiales electorales no pueden tener ningún otro fin que aquel que establece la ley electoral”, añaden.
Para la Secretaría Ejecutiva y el Comité de Información del IFE, no existe razón alguna para interrumpir el resguardo, la inviolabilidad y la destrucción de las boletas, con excepción de un mandato judicial emanado del TEPJF.
El rechazo a la solicitud de información llegó a Proceso un día después de que la Sala Superior del TEPJF declaró presidente electo a Felipe Calderón.
Ahora, Proceso cuenta con 15 días hábiles para presentar un recurso de revisión ante el Comité de Información del IFE y, en caso de confirmarse la negativa, aún queda la posibilidad de recurrir al TEPJF.